En 2020, creció el número de niñas víctimas de feminicidio en México

Foto tomada de: cuestione.com

Shelma Cerrillo / Cuestione

Desde 2020, muchas personas han sufrido pérdidas humanas por la COVID-19. Perola otra pandemia, la de la violencia contra las mujeres, también sigue dejando víctimas.

Ni el nuevo coronavirus, ni las medidas de confinamiento… nada impidió que creciera el número de niñas víctimas de feminicidio en 2020, en México, respecto al año previo.

Sin ropa interior, con la falda levantada y con presuntos signos de abuso sexual, así encontraron el cuerpo sin vida de Tomasa, una niña de nueve años, en una casa en construcción, en el municipio de Cuajinicuilapa, Guerrero.

Tomasa fue reportada como desaparecida el 20 de diciembre de 2020, aún así, las autoridades gubernamentales no evitaron que le quitaran la vida violentamente y por razón de género, al igual que a otras 111 niñas víctimas de feminicidio, 17 más que las registradas en 2019.

¿Lo peor? Otras 176 pequeñas fueron víctimas de homicidio doloso durante el mismo año en el que llegó el SARS-CoV-2 a nuestro país.

Eso significa que en 2020, las historias de vida de 288 niñas fueron interrumpidas por un feminicida u homicida, dos más que en el año previo. Aunque la cifra podría ser mayor, considerando que en 2020 se registraron 512 mujeres víctimas de homicidio doloso o feminicidio, sin rango de edad especificado.

Durante 2020 se contabilizaron, en total, 969 víctimas de feminicidio (una más que en 2019) y 2,783 mujeres y niñas víctimas de homicidio doloso (85 menos que el año previo).

La ausencia de las autoridades

Otro de los crímenes que indignó al país a inicios de 2020 fue el feminicidio de Fátima. La pequeña de siete años fue secuestrada, asesinada y violada en la alcaldía Tláhuac, Ciudad de México.

En el caso de Fátima hubo una cadena de negligencias por parte de las autoridades capitalinas, lo que provocó enojo e impotencia en la ciudadanía. Seis días después de que encontraran el cuerpo de Fátima, sus familiares, amigos, vecinos y colectivos feministas salieron a las calles para exigir justicia.

Y es que, después que la hallaron asesinada “encuentran los videos (donde se observa que una mujer se la lleva de la mano al salir de su escuela). El problema no sé si es negligencia, o si nos les importa, ya no sé qué es, no están buscando a la gente”, nos dijo entonces María Salguero, creadora del Mapa Nacional de Feminicidios en México.

“Hay un factor importante de impunidad, en seguridad y procuración de justicia, pero también hay un problema importante de capacitación, que se debe hacer desde las agencias de salud, educativas, de desarrollo social, ya que son las que pueden detectar casos tempranos”, dijo Francisco Rivas, director general de la organizaciónObservatorio Nacional Ciudadano, en febrero del año pasado.

Colima sigue siendo la entidad más peligrosa para las mujeres

María Herlinda, una mujer de 24 años, fue una de las 97 mujeres que fueron asesinadas en Colima, en el año 2020. María estaba embarazada cuando fue apuñalada, presuntamente por su ex pareja, en el municipio de Comala, Colima.

Desde 2016, esa entidad federativa se encuentra entre las peores del país con la primera o segunda peor tasa de asesinatos contra mujeres (homicidios dolosos o feminicidios). En 2020 se registraron 25.0 asesinatos por cada mil mujeres.

A Colima le siguen Baja California, Chihuahua, Guanajuato, Zacatecas y Michoacáncon tasas de entre 10 y 16 asesinatos por cada 100 mil mujeres.

El promedio diario no ha cambiado

En total, más de 3,700 mujeres y niñas fueron violentadas hasta provocarles la muerte entre enero y diciembre de 2020, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Lo anterior significa que cada día mataron a 10.3 mujeres, en promedio, en ese año. O en otras palabras, que al menos 10 mujeres fueron asesinadas, al día. Ese promedio mínimo es igual al registrado en 2019, el año más violento en la historia reciente de México.

Las armas más usadas contra ellas

Cuatro de cada 10 feminicidios (44%) se cometió con “otro elemento”, es decir con un arma distinta a un arma de fuego o arma blanca; éstas últimas se usaron en 23% y 24%, respectivamente. Y en 8% de los casos no se identificó el tipo de arma, según la clasificación del Secretariado Ejecutivo.

Cuando las autoridades registran que el tipo de arma que se usó contra la mujer fue “otro elemento” quiere decir que la mujer pudo ser envenenada, estrangulada, quemada, ahogada, asfixiada, entre otras modalidades.

Mientras que siete de cada 10 homicidios dolosos contra mujeres (71%) se cometieron con un arma de fuego; muy por encima de “otro elemento” (19%) y de arma blanca (7%). En este tipo de delito no se especificó el tipo de arma usada en el 3% de las víctimas.

Carolina, Claudia, una mujer desconocida, todas asesinadas en 2021. La lista sigue creciendo sin que las autoridades lo impidan. ¿Hasta cuándo encontrarán una “cura” o “vacuna” para esta otra pandemia que sufren las mujeres?