Un paso hacia el Común en el aniversario de la Casa de los Pueblos y Comunidades Indígenas “Samir Flores Soberanes”

Colectivo Grieta
13 de octubre de 2025

Ciudad de México.- En el marco del 5º aniversario dela Casa de los Pueblos y Comunidades Indígenas “Samir Flores Soberanes” en lo que fueran las instalaciones del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), la comunidad Otomí de la Ciudad de México anunció que ese espacio se convertirá en un punto de construcción de El Común en la Ciudad de México. Lo anterior se dio a conocer el pasado 12 de octubre en un comunicado leído en el acto de aniversario de la toma de las instalaciones del mal llamado INPI, ubicado en el pueblo de Xoco, en la Ciudad de México. Este acto de aniversario formó parte de la Jornada de Lucha y Resistencia en Defensa de “El Común” y en contra de la Guerra a los Pueblos Zapatistas.

En la actividad concurrieron cientos de personas, que escucharon la palabra de la comunidad otomí, del Congreso Nacional Indígena y el saludo del EZLN a la Casa de los Pueblos y Comunidades “Samir Flores Soberanes”.

 

Los compañeros de la Casa de Los Pueblos Samir Flores Soberanes en su pronunciamiento compartieron:
“No tenemos nada que celebrar que no sean…
533 años de Resistencia y Dignidad de Nuestros Pueblos, 29 años de la fundación del Congreso Nacional Indígena, CNI, 5 años de la toma del mal llamado INPI”
La comunidad Otomí recordó cómo hace más de 30 años, el desprecio y la discriminación de los malos gobiernos los obligaron a salir de Santiago Mexquititlán Querétaro y, llegando a la Ciudad de México, se encontraron con grandes construcciones inmobiliarias, pero ninguna destinada para las comunidades indígenas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Representación de la toma del INPI por parte de la Escuelita Otomí .
Foto: Colectivo Grieta

Recordaron como el 12 de octubre del 2020 durante la “Jornada Nacional de Movilización en Defensa de la Madre Tierra y contra la Guerra al Ejército Zapatista de Liberación Nacional EZLN” decidieron tomar el INPI, no sólo por el derecho a una vivienda diga, sino como un “Acto de repudio a los ataques paramilitares y la guerra contrainsurgente en contra del EZLN, y de las comunidades Zapatistas; así mismo, en contra de la guerra y asesinatos que se cometen contra los pueblos originarios y las comunidades indígenas pertenecientes al Congreso Nacional Indígena y al Concejo Indígena de Gobierno”.

A 5 años, el ataque a las comunidades originarias y organizaciones que luchan por la vida se ha recrudeciendo por parte de la autodenominada “Cuarta Transformación” por lo que los Otomíes nuevamente se manifestaron:
“Denunciamos enérgicamente el ataque, hostigamiento y manipulación, que hacen los tres niveles del mal gobierno hacia los pueblos bases de apoyo Zapatista por el asunto de la tierra recuperada. Y desde aquí, llamamos a la solidaridad nacional e internacional para con nuestr@s herman@s del EZLN y las comunidades Zapatistas”.
Las comunidades en Resistencia y Rebeldía que habitan la “Casa de los Pueblos Samir Soberanes” como se renombró al mal llamado INPI desde su toma hace 5 años, se solidarizaron y abrazaron a las madres buscadoras, a las madres y padres de Ayotzinapa y condenaron el genocidio y la guerra que le impone el sistema capitalista al pueblo palestino.
Hoy como hace 5 años en un contexto de guerra contra los que defienden la vida y en el marco de la “Jornada de Lucha Y Resistencia en Defensa de “El Común” y en contra de la Guerra a los pueblos Zapatistas” la comunidad otomí anunció:
“en este territorio también recuperado hace 5 años, construiremos “El Común” en la Ciudad de México, con trabajo colectivo, con convicción de lucha, con dignidad, con resistencia y rebeldía, como la única opción de vida para cruzar la tormenta y sobrevivir a la guerra capitalista y patriarcal que nos imponen los dueños del poder y del dinero”.

Invitaron a colectivos, pueblos, comunidades, organizaciones, redes de resistencia y rebeldía en individuos de México y el mundo para que se sumen a la construcción colectiva de “El Común”.
Mencionaron que en “El Común” se desarrollará: “vivienda, área para asambleas, locales comerciales, cocina y comedor comunitario, radio comunitaria, escuelita autónoma, medicina alternativa y comunitaria, sala de usos múltiples-auditorio, estacionamiento, áreas de esparcimiento y sobre todo, se generará con el trabajo colectivo. Organización, autonomía, educación, trabajo, salud, alimentación, vivienda, cultura y arte. ¿Le entran?”

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Presentación de maqueta con espacios a construirse en EL COMÚN.

Foto: Colectivo Grieta

Al acto asistieron, entre otros, representantes de Congreso Nacional Indígena- Consejo Indígena de Gobierno, compañeros de la Región Cholulteca de Puebla, vecinos del pueblo de Xoco, madres y padres de los jóvenes desaparecidos de Ayotzinapa, compañeros dela Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo de Tehuantepec (UCIZONI), compañeras en lucha de la zona de los Pedregales la Ciudad de México, compañerxs organizdxs de la Comunidad trans de la Ciudad de México, representantes de la Asamblea permanente del Pueblo de San Gregorio Atlapulco (Xochimilco), compañeros nahuas de Santa Ana Tlacotenco (Milpa Alta), de Xochitlanezi (Tláhuac), Red de Apoyo Iztapalapa Sexta, compañeros de los 12 Pueblos Originarios de Tecámac, de la UPREZ, de Mujeres y la Sexta, de la Unión de Vendedores Ambulantes 28 de octubre (Puebla), Concejo Indígena y Popular Emiliano Zapata de Guerrero y la Coordinadora de Colonos de Ecatepec entre otras organizaciones, colectivos, comunidades e individuos.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Foto: Colectivo Grieta

Durante el evento, el Congreso Nacional Indígena en voz de Ma. de Jesús Patricio, Marichuy, convocó a las “Jornadas Permanentes Rumbo a los 30 años de la fundación del CNI frente a la guerra Capitalista en contra de la humanidad y los pueblos originarios fortalezcamos al CNI”

El 12 de octubre de 2026, se cumplen 30 años de la fundación del CNI como la casa de los pueblos originarios que en México resisten la pesadilla llamada capitalismo, señaló Marichuy. Recordó cómo en 1996 se contó con la presencia de la Comandanta Ramona, delegada del Comité Clandestino Revolucionario Indígena-Comandancia General del EZLN; y con más de 3 mil delegadas y delegados de todo México, se construyó un espacio organizativo propio, el CNI, bajo los 7 principios del “Mandar Obedeciendo”.

“El CNI cumplirá 30 años resistiendo la más cruenta guerra de conquista desatada nunca antes en contra de nuestros pueblos y en contra de los pueblos del mundo, siendo su más terrible expresión el doloroso genocidio del Pueblo Palestino…

… cumplirá 30 años con un gobierno, el de la Cuarta Transformación, que disfraza su complicidad con dicha guerra repartiendo millones de pesos mediante múltiples programas sociales y empleando un discurso de rechazo al neoliberalismo pero sin renunciar a éste…”

Las expresiones de la guerra capitalista

Marichuy hizo un recuento de las bajas de la guerra de conquista: más de 121,615 desaparecidos, duplicándose la tasa entre 2024 y 2025. Un promedio escandaloso de homicidios dolosos: 59.5 víctimas diarias. La tragedia humana del tráfico de seres humanos para múltiples propósitos; cientos de jóvenes reclutados por los cárteles del crimen organizado para formar ejércitos irregulares que disputan territorios.  La militarización del país, la entrega de sectores clave a la SEDENA y la SEMAR acompañada de la impunidad a los militares; el predominio del crimen organizado en la economía del país y sus estructuras de gobierno. El desastre del campo mexicano y la pulverización de la soberanía alimentaria por las políticas del libre comercio impulsadas por el actual y anteriores gobiernos. La pobreza estructural, la pérdida de derechos de los pueblos originarios, la precarización de la salud y la educación, mientras los banqueros tienen ganancias históricas, como los 288.340 millones  de pesos en 2024, imponiéndose un récord nunca antes visto. La sequía y el cambio climático que no explican, por sí solos, la caída del campo, y junto con ello la economía campesina y la producción de alimentos para satisfacer sus necesidades también se derrumban. A pesar de todo ello, la importación de maíz este año alcanzará una cifra récord de 25.8 millones de toneladas.

La continuidad neoliberal contra los pueblos originarios y campesinos

El CNI también denunció la permanencia del marco jurídico de la contrarreforma al artículo 27 constitucional de 1992; la aprobación hace un año de la reforma constitucional en materia indígena que omite el reconocimiento del territorio de los pueblos. La guerra por medio del reordenamiento territorial nacional, de sus poblaciones, flujos migratorios, fronteras y regiones, a partir de los megaproyectos como:  el Tren Maya, el Corredor Interoceánico y el proyecto Integral Morelos; o por medio de programas regionales de reordenamiento territorial, proyectos extractivistas o de conducción de hidrocarburos. El incremento de la importación de transgénicos y el control externo de la producción agropecuaria nacional, principalmente campesina, debido al T-MEC, en vigor desde julio de 2020 y continuación del TLC vigente desde 1994.

En esta continua guerra de conquista, en medio de la mayor devastación planetaria, el CNI convoca a fortalecerse como una red que permita a los originarios resistir y defender la vida, la madre tierra, el territorio, la cultura y su autonomía. Por eso convocaron a las: “JORNADAS PERMANENTES RUMBO A LOS 30 AÑOS DE FUNDACIÓN DEL CNI”

Las jornadas iniciaron el domingo 12 de octubre y culminarán el 12 de octubre de 2026.

Saludo a la Casa Samir Flores Soberanes

A nombre de las mujeres, niños, ancianos, varones y otroas zapatistas que resisten en las montañas del sureste mexicano, el Subcomandante Insurgente Moisés mandó un saludo a la Comunidad Indígena Otomí residente en la Ciudad de México. Agradecieron a las muestras de solidaridad y apoyo ante las agresiones que han recibido por los gobiernos de la llamada 4T.

El SCI Moisés señaló que aunque en lejanas geografías, los acercan el compromiso de resistencia y rebeldía frente a la hidra capitalista, los unen e identifican la lucha por la vida.

“Es nuestro pensamiento que la columna vertebral de nuestra lucha es el Común. Esto es, buscar y encontrar lo que nos une, pero sin dejar de ser lo que cada quien es. Renunciar a tratar de convencer a todas, todos, todoas, a nuestra imagen y semejanza. Renunciar a la construcción, consciente o inconsciente, de nuevas pirámides que suplan a las actuales para que todo cambie pero siga igual. Renunciar a imponer un camino único, un mismo paso, un modo idéntico, una forma calcada ” SCI Moisés

En el comunicado las comunidades zapatistas señalan que el COMÚN es algo a construir, algo sin recetas ni manuales, ni teoría;  se necesitará de nuevas formas de lucha, organización y sobre todo de nuevas formas de relacionarnos entre quienes resistimos; cada quien según su calendario, geografía y modo.

El SCI Moisés mencionó las condiciones de acoso, mentira, simulación y engaño a pesar de las cuales, las hermanas otomíes en resistencia construyen un espacio mirando lejos, no arriba, sino a los lados; donde están otras, otros y otroas como ellas.

La comunidad otomí que abraza y acompaña la propuesta zapatista de EL COMÚN, pondrá en práctica esta nueva iniciativa en la Ciudad de México, con no pocos retos y dificultades, con digna rabia y rebeldía.

“Tendrán aciertos que celebraremos todos. Tendrán tropiezos que ayudaremos a resolver. Tendrán golpes que aliviaremos con la palabra hermana, y su ejemplo, será semilla que, en otros calendarios, en otras geografías, hará nacer una planta diferente, distinta, pero la misma en su dignidad”. SCI Moisés

El quinto aniversario de la toma del INPI también estuvo acompañado de pláticas, encuentros, música y teatro durante dos días. La comunidad otomí compartió con los asistentes la comida, la lucha y la palabra. La propuesta zapatista de EL COMÚN, encontró eco en las comunidades indígenas que habitan la Ciudad de México y ya permea en el pensamiento de quienes luchan por la vida y contra el capitalismo. El ataque a la propuesta zapatista en las montañas del sureste mexicano por parte de los tres niveles de gobierno, encontró respuesta en la Casa de los Pueblos Samir Flores y en las organizaciones, colectivos, pueblos e individuos que se manifiestan de diversas formas durante las jornadas de denuncia por las agresiones a las comunidades zapatistas y la Asamblea de Gobiernos en Común.

Fueron dos días de fiesta y encuentro, de solidaridad con el EZLN, en defensa del COMÚN y en contra de las agresiones de su proyecto autónomo; de pronunciamientos de hermandad con el pueblo palestino; de escuchar la palabra de los pueblos originarios, del CNI, de las comunidades zapatistas y de la comunidad otomí en la Ciudad de México. Fueron dos días de memoria y de propuestas en defensa de la vida y construcción del COMÚN del que hace eco la incansable resistencia de la comunidad otomí en la capital del país.