Gran precariedad laboral viven los mexicanos, señala el Coneval

Redacción / Cambio de Michoacán

Ciudad de México.- En México la mayor parte de la población sufre una “extendida precariedad laboral”: gana salarios de miseria, carece de un contrato escrito –lo que abre la puerta a abusos-, ni prestaciones de seguridad social–, y además los trabajadores suelen ser despedidos de la noche a la mañana, según un estudio que publicó este miércoles el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval). Las principales víctimas de esta precariedad son las mujeres, las poblaciones indígenas, los migrantes, los jóvenes y las personas con discapacidad, observó el Coneval en el amplio Diagnóstico del Derecho al Trabajo 2018.

Las principales víctimas de esta precariedad son las mujeres, las poblaciones indígenas, los migrantes, los jóvenes y las personas con discapacidad

Según el Coneval, los nuevos empleos que se generaron mediante “campañas o fiscalización” desde 2012 fueron de “bajos salarios”; a la fecha siete de cada diez trabajadores formales ganan menos de tres salarios mínimos, y cuatro de cada diez trabajadores tienen un ingreso que no les permite comprar los productos de la canasta alimentaria. Cada año desde 2005 y 2015, un millón de jóvenes se incorporaron a la población económicamente activa, y se convirtieron en potenciales buscadores de empleo; a la par, la caída del crecimiento económico redujo la generación de empleos. Ambos factores combinados provocaron un disparo de 32.7% en la tasa de desempleo, de 16% de la informalidad, y la mayor precariedad laboral. En años recientes, la precariedad se agravó con el incremento del número de trabajadores con contratos temporales y la práctica cada vez más frecuente de recurrir a la subcontratación. Aunado a ello, el informe destacó la “falta de organizaciones sindicales verdaderamente representativas y de un terreno de juego más nivelado en los órganos tripartitos y los espacios de diálogo social”. De acuerdo con el estudio, el 26% de los trabajadores lleva menos de un año en su trabajo, y solamente el 8.6% de ellos lleva más de dos décadas, y la tasa de “rotación anual” de los puestos de trabajo es de poco más de un año; es decir, que cada año se sustituyen los trabajadores de tres de cada diez puestos, sobre todo en los sectores de la construcción y la agricultura.

A pesar de que México firmó 79 convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y estableció el derecho al trabajo hace cien años en el artículo 123 de la Constitución, el 76% de la población considera que el Estado mexicano incumple con su deber de garantizar un “trabajo bien remunerado”, y nueve de cada diez personas preferirían tener un trabajo formal. El Coneval también observó que “en 2016, la mitad de los entrevistados no escucharon siquiera hablar de los derechos sociales, es decir, apenas hubo una leve mejora respecto de dos años atrás (…) entre aquellos que respondieron que sí conocían estos derechos, apenas 5.4% escuchó hablar del derecho al trabajo y solo 2.5% mencionó la seguridad social”. Las empresas pueden abusar de sus asalariados con una impunidad casi absoluta, dado que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STyPS) prefiere “asesorar” las empresas a imponerle sanciones. El estudio muestra que el Estado abandonó a los trabajadores. En 2010 por ejemplo, el gobierno destinó el 0.07% del gasto público para la capacitación y la intermediación. “Al comparar los presupuestos destinados al financiamiento de la formación profesional, México tiene menos de la décima parte de los recursos que se destinan en Brasil”, subrayó.

Por si fuera poco, el gobierno recortó el presupuesto del Servicio Nacional del Empleo, que sirve para acercar las empresas con los solicitantes de empleo y de por sí es insuficiente: Según el estudio, en 2016 el SNE recibió 2 millones de solicitudes de empleo, y solo pudo canalizar 477 mil, dejando fuera a ocho de cada diez personas que buscaron un empleo formal por esta vía. En Campeche, el 93% de los solicitantes no tuvo respuesta. “La principal vía utilizada para encontrar vacantes y empleo fueron los medios informales, lo que llevaría a personas de bajo nivel socioeconómico a ocupar empleos precarios”, observó el Coneval, según el cual siete de cada diez trabajadores obtuvieron su empleo por medio de parientes o amigos.

http://www.cambiodemichoacan.com.mx/nota-n51031