De cómo un baile sonidero en Iztapalapa derivó en una balacera en Benito Juárez (Ciudad de México)

Texto: José Ignacio De Alba y Arturo Contreras Camero
Fotos: Jose Ignacio de Alba y Cuartoscuro
Pie de Página

Durante la madrugada de este lunes, la policía capitalina baleó dos vehículos donde se transportaban integrantes de una agrupación musical. La versión oficial es que la policía tenía una denuncia por “robo” de un tráiler. Pero esta historia comenzó un par de horas antes en Iztapalapa, cuando se intentó dar un baile callejero y los vecinos se enfrentaron con la policía

En el último día de celebraciones de la iglesia Cristo Rey, en la alcaldía Iztapalapa, los pobladores acudieron a la feria, a los juegos mecánicos, a los puestos de comida y a los “bailes sonideros”. Para sorpresa de los asistentes una de las presentaciones musicales fue reprendida por la policía, y el altercado con los pobladores se convirtió en un zafarrancho que acabó en una balacera en una lejana alcaldía unas horas después.

 

Los feligreses de la iglesia Cristo Rey, en la colonia Leyes de Reforma, celebraron desde el viernes el 20 aniversario de su templo. Por las noches los colonos se agasajaron con buñuelos, fritangas y palomitas. Las birrias, atoles y panes de pueblo ocuparon las calles. También los “sonideros”, con música en las calles, atiborraron las vías aledañas a la iglesia.

José Luis N, el secretario del padre de la iglesia, explica que la festividad empieza con un jubileo y luego durante 60 días se camina por la colonia acompañados de un coro, cada noche el Cristo Rey es resguardado en una casa diferente donde los anfitriones ofrecen comida a los asistentes. Luego los últimos tres días la imagen es llevada a la parroquia y en las calles se hace una feria. Pero el último día uno de los equipos de sonido -que no contrató la iglesia aclara José Luis- tuvo un altercado con la policía.

El baile estaba planeado para las 9 de la noche en la calle Batalla de Loma Alta. Asistirían tres sonidos: “Rumba caliente”, “Rolly” y “Pancho”. Pero cuando los organizadores desmontaron del camión las bocinas, el templete y las luces, la policía capitalina impidió el evento.

María M explica: “no entiendo por qué a ellos no los dejaron, si ya había otros dos sonideros acá cerquita”.

Varios colonos arrojaron piedras y palos a los policías, que respondieron de la misma manera. La bronca por instalar el “sonido” se convirtió en un asunto barrial y el zafarrancho llegó a los balazos.

Fausto Valle, que vive frente a donde se instalaría el sonidero, explica que en las azoteas aledañas a la suya hay casquillos de bala, además el techo de su propia casa fue utilizado por vecinos para arrojar piedras a los policías.

A las 11 de la noche policías entraron a la fuerza a la casa de Valle, según explica el hombre, y golpearon a su esposa en la cabeza y le rompieron un brazo a su yerno.

No fueron los únicos, la policía capitalina, según relatan vecinos, se metió a un par de casas más y golpeó a sus habitantes sin investigar si realmente estaban involucrados en la bronca. El recuento que hacen los colonos es de 15 personas heridas y varios detenidos.

Cuando los ánimos bajaron, el sonidero esperó a que las otras agrupaciones acabaron sus conciertos para salir acompañados a otro punto de la Ciudad de México. Valle relata que la policía capitalina ya preparaba una redada desde la noche, en los ejes viales.

Los dos sonideros que se presentaron durante la feria de Cristo Rey escoltaron la salida del único conjunto que no pudo presentarse.

Vecinos de la colonia -que prefieren no ser mencionados en este texto por miedo a represalias- relatan que en la madrugada salieron el tráiler y unos veinte vehículos que se trasladaron por Eje 6 hacia el occidente de la ciudad.

Escueta información oficial

Según las versiones oficiales, el problema inició en la colonia Tercera sección de Leyes de Reforma en Iztapalapa. Dos jóvenes intentaron cerrar la vía pública e instalar un equipo de sonido en la calle Batalla de Loma Alta para organizar un baile. Pero no tenían los permisos correspondientes.

 

La Secretaría de Seguridad Ciudadana asegura que vecinos y policías pelearon después de que los agentes impidieron la instalación del equipo de sonido. Videos publicados en redes sociales dan cuenta que el enfrentamiento inició pasadas las 9 de la noche.

La policía informó que detuvo a dos personas, de 46 y 37 años de edad. También, que un policía fue llevado a un hospital por los golpes que recibió en el enfrentamiento.

Las cámaras del C2 detectaron horas después el tráiler del sonidero en el que transportaban bafles, luces y equipo, con rumbo al poniente de la ciudad. El vehículo, según las autoridades, tenía un reporte de robo, por lo que la policía desplegó un retén para detenerlo en el cruce de avenida Cuauhtémoc y Eje 5 Sur, en la colonia Narvarte, de la alcaldía Benito Juárez.

De acuerdo con los testigos en el lugar, el tráiler no tenía ningún reporte de robo, pues pertenecía al sonidero y era manejado por el chofer que suele operarlo.

Al momento de hacer señas para que el vehículo se detuviera, según dice un boletín de la Secretaría, sus tripulantes se negaron y dispararon en contra de los elementos de seguridad. Lo que desató una balacera.

El enfrentamiento en la Narvarte se dio cerca de las dos de la mañana de este lunes 25. Al lugar de los hechos llegaron una decena de patrullas y un helicóptero que sobrevoló la zona por algunos minutos.

En ese enfrentamiento dos personas resultaron lesionadas y una de ellas fue puesta a disposición de las autoridades por portación de armas de fuego.

En ambos eventos participaron decenas de policías; cinco de ellos fueron llevados ante agentes del Ministerio Público para “revisar la mala actuación policial dolosa, el abuso de autoridad y las omisiones en el quehacer policial”.

La jefa de gobierno Claudia Sheinbaum y el jefe de la policía, Omar García Harfuch omitieron hablar del tema. En los tres actos públicos que Sheinbaum tuvo durante el día, evito tener contacto directo con la prensa.

Los comunicados no especifican cómo es que de las 9 de la noche, cuando inició la trifulca en Iztapalapa horas más tarde el tráiler tenía un reporte de robo que terminó en una balacera en Benito Juárez. Ni por qué la policía le dio alcance al vehículo tan lejos del primer lugar de los hechos (más de 10 kilómetros).

¿Abuso policial?

Sobre la calle de Uxmal, a un lado de la delegación Benito Juárez fue llevada una de los vehículos involucrados en la balacera. Una camioneta Tahoe con al menos siete impactos de bala, uno de los costados del carro permanece manchado de sangre. Una de las llantas ponchada, quizá por un balazo.

Durante todo el recorrido de los músicos, desde Iztapalapa hasta la colonia Nápoles, hay cámaras de seguridad pública. En la misma calle que se pretendía instalar el “sonidero” hay videovigilancia; lo mismo que en el sitio donde la camioneta fue baleada.

Sobre el Eje 6 y la avenida Cuauhtémoc, los vidrios rotos y los charcos de sangre secos aún permanecían la tarde de este lunes en la banqueta y en la calle. Las cintas de seguridad para resguardar la escena del crimen están rotas y la gente pasa desconcertada sobre los lagunajos rodeados de hormigas y moscas.

Nadie resguarda el sitio y hay quien asegura que antes de esto la escena fue modificada. Testigos que aparecen en un video casero, grabado después de la balacera, aseguran que policías patearon los casquillos de las balas a las coladeras, incluso ellos mismos compraron vasos para proteger objetos que pudieran ayudar a la investigación.

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