Sin avances, la investigación por el asesinato de Samir Flores en Morelos
Jaime Luis Brito / Proceso
AMILCINGO, Mor. (apro).– A un mes del asesinato de Samir Flores Soberanes, uno de los más importantes opositores al gasoducto y la termoeléctrica del Proyecto Integral Morelos, las autoridades estatales no han anunciado avances en la investigación y la Fiscalía General de la República (FGR) no ha atraído el caso, como lo exige la comunidad y su familia.
“Para Amilcingo, los familiares y amigos de Samir, la justicia está aún lejos de llegar ante el despojo, división y destrucción que ha provocado el Proyecto Integral Morelos en nuestras vidas”, dice un comunicado firmado por el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y Agua Morelos Puebla Tlaxcala y la Asamblea de la Resistencia de Amilcingo.
A un mes de su asesinato “no se ha investigado a quienes están interesados en el funcionamiento del Proyecto Integral Morelos y/o pueden ser beneficiados económicamente por el mismo, desde funcionarios del gobierno, exfuncionarios, grupos que están a la espera de un beneficio en la negociación hasta las empresas concesionarias del gasoducto”.
Los activistas reclaman que el gobierno federal no sólo no ha permitido la atracción del caso por parte de la FGR, sino que además continúa con la idea de que la termoeléctrica de Huexca comience a operar a la brevedad a pesar de la oposición de las comunidades.
Al gobierno estatal le reclaman el hecho de que Samir Flores luchó durante 17 meses para conseguir reconocimiento oficial para una primaria en el centro de la comunidad, y ahora sólo les han proporcionado cinco de los seis maestros que necesitan; las autoridades tampoco admiten que el plantel escolar lleve el nombre el del activista asesinado.
“Seguimos con la herida abierta y sangrando porque, a pesar de lo sucedido, el gobierno estatal no respeta la decisión tomada en asamblea general de la comunidad, de que nuestra escuela lleve por nombre Samir Flores Soberanes, intentando pasar una vez más por alto nuestra libre determinación”, reclaman.
Para concluir, señalan los activistas “para nosotros Samir no ha muerto, vive en la lucha por la justicia y la autonomía de nuestros pueblos y seguirá vivo mientras siga viva la llama de la rebeldía en todos nosotros. La justicia no llegará de arriba, sino de nuestro compromiso y amor de seguir los pasos de Samir para beneficio de nuestros pueblos”.