Preocupa a colectivos giro comercial en parque Rufino (Nuevo León)

Victoria Félix / Milenio

Integrantes de Pro Montaña, Salvando San Pedro, Propuesta Ciudadana, y Sierra en Peligro criticaron que haya más invasión a áreas verdes, asegurando que eso no estaba en el proyecto.

Voceros de diversos colectivos de San Pedro Garza García se pronunciaron en contra de la construcción de una tienda y un restaurante en el parque Rufino Tamayo, pues alegaron que esto “abre la puerta” a otros giros comerciales y mayor invasión de áreas verdes.

Esto, tras darse a conocer que además del museo La Milarca que comprende una extensión de mil 500 metros cuadrados, se desmontarían otros mil 400 metros cuadrados para incluir una tienda y una cafetería en el parque.

Además de que se adecuará un espacio de 5 mil 154 metros cuadrados para “jardines de diseño con bancas” y un sótano de 763.7 metros cuadrados que incluiría cajones de estacionamiento, de acuerdo con los planos del proyecto que reveló ayer el alcalde electo en San Pedro, Miguel Treviño.

Los colectivos Pro Montaña, Salvando San Pedro, Propuesta Ciudadana, y Sierra en Peligro AC, criticaron el desmonte de más áreas verdes y la introducción de giros comerciales.

“El tema de las áreas verdes en el Rufino Tamayo nunca se debió haber abierto porque empieza esa metamorfosis: ahorita empiezas con las tiendas, los cafés, después va a haber un puente que conecte con los nuevos edificios y ahí va creciendo. Abre la puerta a otros giros”, dijo Enrique Burguete, del colectivo Pro Montaña.

“Esa área no estaba planeada para darle un giro comercial es un área verde y el municipio se está saliendo de lo que tenemos originalmente planeado, no hay un por qué hacerlo, realmente no debería de haber ningún uso comercial en la zona”, agregó José Muzquiz Zermeño, integrante de Propuesta Ciudadana.

Por su parte, Celina Cañada de la asociación civil Sierra en Peligro, alegó que el municipio se está “saltando pasos” al desmontar las áreas verdes sin haber demostrado que cuentan con los estudios de impacto ambiental, vehicular e hidrológico para sustentar el proyecto.

“No entregan lo que dio origen a esto, que son los estudios el impacto ambiental, el impacto vial, la cuestión hidrológica, o sea son situaciones muy serias (…) a cualquier sampetrino si quiere hacer algo le piden una serie de requisitos para poder empezar siquiera a desmontar tu terreno, entonces aquí ya están desmontando”, dijo Celina Cañada.

Finalmente, Muzquiz Zermeño cuestionó que el alcalde electo Miguel Treviño de Hoyos revirara en su postura de frenar los museos y pactar con el munícipe actual, Mauricio Fernández, la permanencia de La Milarca en el Rufino Tamayo, en una carta firmada por los dos el pasado 17 de julio.

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