Vendedores ambulantes agreden con palos a comerciantes LGBT+ (Ciudad de México)

Texto: Arturo Contreras Camero

Fotos: Victoria Valtierra / Cuartoscuro

Pie de Página

Vendedores ambulantes identificados como parte del grupo de Diana Sánchez Barrios agredieron con palos a comerciantes de grupos LGBT, pertenecientes a La Tianguis, que acusan agresiones constantes y displicencia de policías de la Ciudad de México

CIUDAD DE MÉXICO.- Un grupo de vendedores, identificados como parte de una amplia agrupación de ambulantes en la capital mexicana agredió a comerciantes de La Tianguis, en la Glorieta de los Insurgentes. A golpes con palos y cinturones, se enfrentaron con miembros de la comunidad LGBTQ, mujeres trans y personas no binarias que desde mayo de este año ocuparon una parte de esa plaza para vender y sostenerse de esa manera.

Desde que se instaló La Tianguis Disidente ha enfrentado muestras de discriminación y odio, además de agresiones por ocupar espacio público secuestrado por mafias de ambulantes que les cobran el uso del espacio.

«Estamos pidiendo que nos apoye la ciudad, el gobierno, que nos apoyen las personas que se supone deberían resolver este tipo de cosas, porque esas fueron expresiones de odio”, asegura en una entrevista una de las comerciantes de La Tianguis.

Diferentes personas que integran La Tianguis identificaron a sus agresores como parte del grupo de ambulantes de Diana Sánchez Barrios, hija de Alejandra Barrios, lideresas del comercio informal en la ciudad.

Alejandra Barrios fue puesta bajo detención preventiva hace dos días porque la Fiscalía General de la Ciudad de México inició una investigación en su contra por robo agravado en pandilla y extorsión agravada.

Hace tres semanas la Unidad de Inteligencia Financiera ordenó que se le congelaran las cuentas por una investigación sobre enriquecimiento ilícito que realiza. Sin embargo, un juez de la ciudad aprobó un amparo para que se liberaran sus cuentas.

«Que siga sonando este caso, que todos se enteren que en la Ciudad de México existen las mafias y en especial  la mafia de Diana Sánchez Barrios», dice la misma comerciante agredida.

Según cuenta, este altercado tuvo un antecedente el sábado de la semana pasada, cuando integrantes de la ocupación económica pidieron que un par de hombres, a los que identificaron como agresores, que se retiraran del espacio porque se sentían amenazadas por su presencia, durante la confrontación, las integrantes de la mercadita pisaron el puesto de este ambulante agresor.

Este jueves, la misma persona regresó a la Glorieta acompañado de un amplio grupo de hombres cargando palos y para agredir a las compañeras de La Tianguis.

Desde que la ocupa económica llegó a la Glorieta enfrentaron rechazo de los otros grupos de ambulantes con los que comparten el espacio, por lo que después de un diálogo, llegaron a un acuerdo verbal con una persona para usar una parte del espacio, sin embargo, este jueves esta persona también llegó a agredirlas.

«Se había ido quedando el acuerdo de que quien llegara temprano podía estar ahí. Porque somos personas de diálogo, sabemos que toda la gente tiene necesidad de comer, pero esto no se vale», asegura la comerciante agredida.

La agresión por el control del espacio no es la única que soportan estas comerciantes, se suma la violencia de género a la que son sujetas todos los días.

«Nos pasan este tipo de cosas diario, cada día viene un agresor y todos los días hay que estarlos sacando, en este momento seguimos sacando agresores. Nos hemos topado con hombres tomando fotos, sobre todo a mujeres, o bueno, a la parte que se ve femenina y a cualquier banda. Nos miran de formas morbosas, pasan a nuestro lado y nos dicen cosas al oído. Machos insultando porque somos lesbianas, porque somos gays, porque somos trans», agrega.

Al lugar llegaron oficiales de la policía de la Ciudad de México, mucho tiempo después de que las agresiones hubieran terminado, cuando llegaron, lo único que hicieron fue burlarse de las comerciantes agredidas, denuncian: «Eso les pasa por gays», señala que les decían.

Después de la agresión, las integrantes de La Tianguis sienten la necesidad de demostrar mayor fuerza y resistencia, como cuenta la comerciante entrevistada:

«La resistencia va a seguir aquí, porque se va a quedar para nuestros hijos y los hijos de quien sea y los hijos de quien decida. Vamos a resistir hasta que no quede mundo».