Corregidora “Un acto de corrupción disfrazado de modernidad” (Querétaro)


Poco más de 10 hectáreas fueron desincorporadas del área protegida de El Batan, en Corregidora. Foto: Eric Pacheco

Eric Pacheco / Proceso

En Querétaro la élite política se entrelaza con ­vínculos familiares y partidistas. Quien esté bien relacionado puede obtener privilegios, como lo muestra el caso del exdirigente de la Coparmex en la entidad, Luis Alfonso García Alcocer, primo del exgobernador ­Mariano ­Palacios Alcocer y quien logró multiplicar el valor de 10 hectáreas unas 30 veces al modificar el uso de suelo con el apoyo del gobierno estatal y del ayuntamiento de Corregidora.

CORREGIDORA, Qro. (proceso).- El empresario Luis Alfonso García Alcocer, primo hermano del exgobernador priista Mariano Palacios Alcocer, logró el cambio de uso de suelo para edificar un desarrollo habitacional para 3 mil personas en un predio de 10 hectáreas llamado El Batán, que hace siete años fue decretado Zona de Reserva Ecológica.

El presidente municipal de Corregidora, el panista Roberto Sosa Pichardo, ha intentado justificar esa acción señalando que la familia Alcocer logró el cambio de uso de suelo en El Batán desde 1991, sólo 11 días antes de que Palacios Alcocer concluyera su mandato en el estado.

Sin embargo, fue en la actual administración municipal cuando se aprobó un nuevo cambio de uso de suelo que autoriza construir en esos predios inmuebles de hasta cuatro niveles y con una población por hectárea siete veces mayor que la recomendada en 1991.

“En ese momento lo que aprobó el ayuntamiento fue el cambio de uso de suelo, de forestal, que se tenía anteriormente, en 1991 cambiaron a campestre habitacional (…). Lo tenían ellos en habitacional campestre, ahora nosotros lo pusimos en medio, en habitacional, que es como marca el código”, reconoció el alcalde.

Sobre el incremento de habitantes por hectárea, Sosa Pichardo se excusa: no conocía la densidad aprobada antes porque no se localizó toda la información. Por eso, afirma, sólo se homologaron los “términos” y el pasado 9 de julio el municipio aprobó 300 habitantes por hectárea.

En el periódico oficial del estado La Sombra de Arteaga se publicó, el 27 de septiembre de 1991, que en el cambio de uso de suelo se recomendaba una densidad de sólo 40 habitantes por hectárea: “Se considera viable destinar el predio para desarrollo campestre, sugiriendo, en caso de aprobarse la petición, una densidad de población de 40 Hab/Ha”. Eso se dictamina “con base en que el predio en referencia no tiene posibilidad de desarrollo agrícola”.

El ayuntamiento de Corregidora aprobó el cambio de uso de suelo en tres polígonos que suman las 10 hectáreas: uno de comercio y servicios para 304 viviendas y giros compatibles; el segundo, habitacional para 105 viviendas y giros compatibles; y el tercero, habitacional para 185 viviendas. Los 594 inmuebles podrán alcanzar un máximo de cuatro niveles de construcción, tendrán 40% de área libre y una densidad de población media.

Aunque Sosa Pichardo reconoció el valor ecológico de esas 10 hectáreas, al preguntarle si lamentaba que se desincorporaran de la zona protegida, respondió: “Pues la verdad es que no, así como tú me comentas. Yo te comparto: fue un tema de 1991”.

Fe de erratas

La fotografía de apertura del texto “Corregidora. Un acto de corrupción disfrazado de modernidad”, publicado en la página 45 del número 2284 de Proceso, no corresponde al desarrollo inmobiliario El Batán, como se publicó, sino al fraccionamiento Ciudad Maderas Querétaro, que nada tiene que ver con el contenido del texto aludido.

https://www.proceso.com.mx/643301/corregidora-un-acto-de-corrupcion-disfrazado-de-modernidad