TRANSPORTE PÚBLICO: TERROR DE LAS MUJERES (Nuevo León)


Luz Rangel / Reporte Índigo

En Nuevo León, 91.6 por ciento de las regiomontanas ha enfrentado al menos una manifestación de violencia sexual en el transporte público metropolitano, de acuerdo con ONU Mujeres; las autoridades deberán actuar de forma integral en cuatro áreas de cambio que reduzcan la violencia de género

Miradas lascivas, comentarios sexuales, contacto físico como manoseos, persecuciones, exhibición de órganos sexuales masculinos, eyaculación, violaciones y feminicidios enfrentan las mujeres de Nuevo León en el transporte público.

Estos tipos de violencia de género fueron identificados en el Diagnóstico y Programa Metropolitano de Transporte Público Seguro para Mujeres y Niñas, producto de la colaboración entre el Instituto Estatal de las Mujeres y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) Mujeres. El documento fue presentado este 3 de abril en Monterrey.

“A finales de 2017 lo que identificamos con el Instituto de las Mujeres del Gobierno de Nuevo León fue que era importante poder diagnosticar cuál es la situación de violencia en el espacio público y fue a partir de aquí que decimos centrarnos en el transporte. Realmente ha respondido a la priorización por parte del propio gobierno ya que es un área clave”, menciona Belén Sanz, representante de ONU Mujeres en México, en entrevista con Reporte Índigo

El instituto y la organización firmaron un acuerdo de colaboración el 1 de diciembre de 2017 para la implementación del Programa Insignia Global Ciudades y Espacios Públicos Seguros para Mujeres y Niñas. A nivel mundial, alrededor de 30 ciudades se han unido tras su surgimiento en 2010; en México, participan la capital desde 2015, Puebla y Torreón se sumaron en 2016, Guadalajara y cinco municipios de la Zona Metropolitana de Monterrey (ZMM) hace dos años.

“Esta intervención la hacemos especialmente con un enfoque de área metropolitana y esto es importante porque es el primero de esta naturaleza. El gobierno de Nuevo León decidió la importancia de trabajar en cinco municipios que son parte de la iniciativa”, explica Sanz acerca de Monterrey, Apodaca, Juárez, Cadereyta y Guadalupe

La información cuantitativa es resultado de una encuesta que levantó Estudios y Estrategias Para el Desarrollo y la Equidad, EPADEQ A.C., y cuatro recorridos en diferentes rutas y horarios del 15 al 19 de julio de 2018. Además se realizaron grupos focales que incluyeron a hombres y entrevistas a funcionarios de gobierno.

En la metrópoli de Monterrey existen 134 rutas radiales, 29 rutas periféricas, 31 rutas de microbús y tres rutas intramunicipales; hay dos líneas del metro y la Ecovía. De manera que 91.6 por ciento de las encuestadas han enfrentado por lo menos una manifestación de violencia sexual a lo largo de su vida y 84.7 por ciento en 2018

Las agresiones son sistemáticas, pues más de la mitad de las encuestadas señalan que han sido víctimas de más de cuatro manifestaciones de violencia sexual.

“Merece especial atención la práctica de eyacular sobre las mujeres, pues fue señalada en los grupos focales como frecuente dentro de las unidades de transporte público, e incluso hubo quien señaló que algunos hombres suben a redes sociales fotografías de esta forma de agresión”, menciona el documento.

La violencia no sólo ocurre al interior de las unidades de transporte. En los grupos focales, las mujeres revelaron su miedo en las calles, las estaciones y paradas ante la poca vigilancia que hay.

Sin importar su condición física o socioeconómica, cualquier mujer corre el riesgo de ser violentada, por su género, revela el diagnóstico. Al mismo tiempo, el temor es tal que ven a cualquier hombre como posible agresor.

“Los más jóvenes tienden a decirles majaderías sexuales, pero los de mayor edad pasan a los actos más graves”, dice el documento. “Existe una crítica abierta por parte de la población regiomontana a los ‘permisionarios’ por la forma en que los operadores tratan a las usuarias de dichas rutas”, menciona.

EN BÚSQUEDA DE RESPUESTA INTEGRAL

A la presentación del diagnóstico asistieron funcionarios como Martha Cecilia Reyes, presidenta Ejecutiva del Instituto Estatal de las Mujeres de Nuevo León; Cristina Díaz, alcaldesa del municipio de Guadalupe y Jorge Longoria Treviño, titular de la Agencia Estatal de Transporte (AET).

La misma convocatoria que hubo este miércoles se espera que siga para ofrecer soluciones y crear el órgano específico que se encargue del monitoreo Programa Ciudades Seguras.

“Este diagnóstico busca una respuesta integral de todas las autoridades del gobierno y, por lo tanto, no se pretende que trabaje sólo una instancia, sino todas las que tienen una responsabilidad en la gestión del área metropolitana. Esto requiere una inversión y una mirada a corto y largo plazo”, sostiene Belén Sanz, representante de ONU Mujeres en México

Las mujeres utilizan el transporte público metropolitano para realizar actividades cotidianas: 63.3 por ciento para trasladarse al trabajo y 10.5 por ciento para ir a la escuela. Más del 70 por ciento de las mujeres vive con miedo y empieza a cambiar sus hábitos.

Una de las medidas de seguridad que este grupo de población está tomando es usar automóvil propio o el servicio de Uber, sobre todo en horario nocturno. Sin embargo, los recursos económicos son una limitante o el temor a ser violentadas por el conductor.

“Lo que no podemos de ninguna forma es tolerar que esta violencia sea normal. Hay una percepción de que la violencia es su responsabilidad”, argumenta Sanz.

ONU Mujeres sugiere a los municipios y al gobierno estatal prestar atención en cuatro áreas para generar cambios y su representante no descarta un aumento a las tarifas de transporte siempre y cuando sea para mejorar.

La primera se refiere a la generación de datos y evidencias. La segunda contempla leyes y políticas públicas de prevención. La tercera implica inversión en seguridad e infraestructura pública con perspectiva de género. También es necesario alcanzar un cambio cultural.

Las alcaldías de Monterrey, Apodaca, Juárez, Cadereyta y Guadalupe, donde se realizó el diagnóstico, ya cuentan con Alerta de Violencia de Género (AVG), pero necesitan recursos.

“Los gobiernos municipales tienen el rol de acompañar la iniciativa y en su momento es importante que destinen un presupuesto propio”, menciona Belén Sanz

De los cinco municipios, sólo la única alcaldesa estuvo en la presentación del diagnóstico. Cristina Díaz reconoció el reto pero refrendó su compromiso con las mujeres de Guadalupe.

“Los que estamos en el servicio público tenemos la obligación de visibilizar y atender. Representa un reto no sólo en términos legislativos, también en la elaboración de políticas públicas”, dijo.

https://www.reporteindigo.com/reporte/transporte-publico-terror-de-las-mujeres-agresiones-violencia-genero-nuevo-leon/