“Detrás del arresto de mi padre hay tala ilegal”: hijo de Idelfonso Zamora; Amnistía exige su liberación

Juan Luis García Hernández

Amnistía Internacional solicitó al Gobierno mexicano la inmediata liberación del defensor de bosques tlahuica Idelfonso Zamora. Familiares acusaron haber sido amenazados por autoridades de seguridad del Estado de México. ¿Quién gana con la detención de Zamora?

Ciudad de México, 8 de mayo (SinEmbargo).- Familiares de Idelfonso Zamora Baldomero acusaron que a la detención del defensor de los bosques del municipio de Ocuilan, Estado de México, se hizo para proteger los intereses de autoridades que talan ilegalmente árboles en la zona.

Misael Zamora, hijo de Idelfonso, acusó que autoridades locales de San Juan Atzingo, con el apoyo del Gobernador Eruviel Ávila Villegas, confabularon para detener al activista en noviembre del año pasado.

“En el 2011, le arrebatan el cargo a mi padre de comisariado de bienes comunales con muchas irregularidades. Se postula un señor Leobardo Neri Jacinto y él, junto a Arnuldo Gómez Barrón, otro casique más del pueblo, son los que siempre han impulsado la tala, y nunca les ha gustado que mi padre defienda el bosque”, dijo a este medio.

De acuerdo con un análisis de Greenpeace, desde el 1998 a la fecha han sido taladas al menos 250 hectáreas de los bosques del poblado del que es oriundo Zamora.

Hoy Amnistía Internacional (AI) declaró a Idelfonso Zamora Baldomero como un preso de conciencia, una calificativo que aplica para aquellos que han sido encarcelados por expresar sus opiniones políticas.

“A Ildefonso Zamora lo están castigando por denunciar los daños que se están causando al territorio y al entorno de su comunidad. Nunca debió haber sido encarcelado y debe ser puesto en libertad inmediata e incondicionalmente. Proteger el medio ambiente y defender los derechos humanos no son delitos”, dijo Erika Guevara-Rosas, directora para las Américas de AI.

La organización internacional, después de hacer un análisis detallado del caso de Zamora, no sólo consideró que su detención fue arbitraria sino pidió su inmediata liberación.

El 20 de noviembre alrededor de 15 policías ministeriales arribaron al Palacio Municipal de Ocuilan para capturar a Idelfonso Zamora, quien se desempeñaba como Regidor de Turismo y Medio Ambiente.

La denuncia del Ministerio Público de Tengancingo en contra de Zamora se basó en la acusación de Felicitas Germán Sánchez, una señora que alega que un grupo de personas allanó su morada con el fin de destruir objetos, en julio del 2012. De acuerdo con supuestos testigos, que aseguraron que Idelfonso Zamora se encontró afuera del hogar en la ocasión, Germán Sánchez decidió accionar legalmente en su contra por el delito de robo.

“Se trata de un proceso lleno de irregularidades, entre las que destaca que se violentó gravemente su derecho de audiencia y a una defensa adecuada al ocultarle durante tres años que existía una investigación en su contra”, apuntó AI sobre el proceso.

Pero, además, el hijo de Zamora ve en estos actos también la mano del Gobernador Eruviel: “También son responsables Eruviel Ávila y el procurador de Justicia del Estado de México [Alejandro Jaime Gómez Sánchez]”, expuso.

“Todo nace a raíz de esta lucha. Aquí el interés es muy particular del propio Gobierno, pues ya se volvió como una especie de revanchismo de parte del Gobierno en contra de mi padre”, agregó.

Ante la detención de Idelfonso Zamora su familia interpuso ante el Juzgado Quinto de Distrito en Materia de Amparo un recurso de amparo el 5 de diciembre con el fin de evitar el juicio.

Pese a que la audiencia se debió haber llevado a cabo el 6 de febrero, fue pospuesta en dos ocasiones, hacia el 27 de abril, fecha en la que se pudo celebrar, apuntó Misael: “Estamos a la espera. Quiero confiar en los tribunales y magistrados. Mi padre está pagando por un delito que jamás cometió”.

AISLAMIENTO PARA ZAMORA

Idelfonso Zamora guarda prisión en el Centro de Readaptación Social de Tenancingo. Pese a que ha habido esfuerzos para verificar su estado de salud por parte de las organizaciones civiles que lo acompañan, las autoridades del penal han negado su visita.

Este fue el caso del 1 de marzo, cuando representantes del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh) y Greenpeace México realizaran una supervisión de las condiciones en las que se encuentra el líder indígena, quien sufre de diabetes.

En su momento, Miguel Ángel Soto, vocero de Greenpeace México, narró a SinEmbargo que los guardias de la entrada del penal les negaron la entrada y argumentaron que sólo el director decidía si podían visitar o no al defensor de los bosques.

Dos meses después del incidente, aunque asegura que habla con frecuencia con él, el hijo del defensor de bosques teme por la salud de su padre.

De acuerdo con AI, Zamora recibió malos tratos en su camino a prisión; recibió “empujones”, “golpes” y “malos tratos”, acusó la organización internacional.

“De un fuerte empujón lo hicieron caer por unas escaleras. Estos malos tratos le dejaron lesiones en el cuerpo y le provocaron que una vieja herida en el pulgar derecho se reabriera, provocándole una fuerte infección casi al punto de necrosis -Ildefonso padece de diabetes, por lo que sus heridas tardan en sanar-“, citó un comunicado de la organización.

“Siempre nos preocupamos por él. Pero él nos dice que le echemos ganas, es un hombre que no dobla las manos así de fácil”, expuso Misael.

AMENAZAS A LA FAMILIA

Misael Zamora acusó a este medio que la persecución que sufre su padre ha sido trasladada a su persona.

El 21 de abril del año pasado, un grupo de alrededor de 40 elementos integrantes de la policía estatal, Secretaría de la Defensa Nacional, miembros de Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y de la Protectora de Bosques del Estado de México (Probosque) detuvieron a Misael de forma momentánea, a diez kilómetros de San Juan Atzingo.

“Llega un tipo de nombre Juan Carlos Lara, diciendo que ya había valido madre, que era una consigna. Me intimidaron, me quisieron agredir, yo contestaba lo que yo podía”, dijo Misael, quien en su versión fue interceptado por las fuerzas de seguridad cuando recolectaba leña.

Debido a la intervención de varios pobladores, las fuerzas de seguridad lo dejaron ir: “Por el miedo, nunca levanté una denuncia, y luego me enteró que tengo una averiguación por daños al medio ambiente”, dijo.

AI retomó estas amenazas en su estudio del caso. Y expuso que aunque una queja fue presentada el 4 de febrero a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en contra de las diversas autoridades, aún no se obtiene respuesta.

“Mediante la queja también se solicitaron medidas cautelares de conservación para evitar la consumación irreparable de violaciones al derecho de integridad y libertad personal a favor de Misael y la familia Zamora”, reza el análisis de AI.

Sin embargo, Misael lamentó el papel de la CNDH. “No hemos tenido respuesta ni informe de lo que se está realizando en la Comisión, no tenemos el respaldo de lo que estuviéramos esperando. Esperábamos algo más, otro apoyo de esta instancia”.

http://www.sinembargo.mx/09-05-2016/1658204