Abuso sexual y trata de personas al amparo del poder en México… y en Colima
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Redacción / Diario Avanzada
Colima, México, Avanzada (06/03/2021).- En los últimos años han brotado graves casos de abuso sexual al amparo de las cumbres del poder, no sólo en México, sino también en Colima, muchos de ellos contra menores de edad, que han quedado en la impunidad.
La situación más notoria en Colima es la ocurrida el cuatro de marzo de 2019 en la casa del entonces secretario de Turismo del gobierno estatal, Efraín Heriberto Rodríguez Angulo, donde se desarrollaba una fiesta en la que fue asesinado el adolescente Josué.
Aunque hubo muchas incongruencias en la declaración del funcionario, quien aseguró que la tragedia se generó por un asalto cometido por un grupo armado en su casa, la Fiscalía General del Estado (FGE) no ha esclarecido lo que realmente ocurrió.
Un aspecto delicado fueron las evidencias surgidas en su momento en el sentido de que en esa fiesta en la casa del funcionario estaban presentes sexoservidores, por lo que la presencia de adolescentes como Josué y al menos otro más en ese ambiente presumiblemente impropio para ellos, podría configurar el delito de corrupción de menores por el que evidentemente tendría que responder el dueño de la casa.
De acuerdo con Eric Magaña, padre de Josué, el ahora exsecretario de Turismo goza de la protección de la Fiscalía y del gobernador de Colima, José Ignacio Peralta Sánchez.
Un caso que ha llamado la atención a nivel nacional es el del aspirante de Morena a la gubernatura de Guerrero, Félix Salgado Macedonio, quien a pesar de enfrentar varias acusaciones por presunta violación a abuso sexual ha sido respaldado por diversas instancias del partido en el poder, desde el dirigente nacional, Mario Delgado carrillo, hasta el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
Alrededor de este asunto, el movimiento feminista de México ha elevado protestas exigiendo a Morena que no aceptara su candidatura, por lo que se prevé que esta exigencia se convierta en una de las principales demandas de las marchas de este ocho de marzo, Día Internacional de la Mujer.
En Puebla, el caso del exgobernador Mario Marín se convirtió en un emblema de los vínculos del negocio de la trata de personas con los sectores del poder político, luego de que este mandatario se prestó a reprimir a la periodista Lydia Cacho, luego de que ésta denunció a una red de trata de personas en Cancún, que involucraba a poderosos empresarios ligados a Marín, bautizado como el “gober precioso”.
La detención del líder de la Iglesia de la Luz del Mundo en Estados Unidos, acusado de abuso sexual y otros delitos, sacó a relucir los vínculos que tenía ese personaje con gobernantes en México, incluido la cercanía con el gobernador de Colima, José Ignacio Peralta, quien al menos en una ocasión fue fotografiado en un evento religioso de esa congregación fundada en Guadalajara.
Un reportaje de investigación realizado por el equipo de la periodista Carmen Aristegui desveló en 2014 una presunta red de prostitución que manejaba el dirigente del PRI en el entonces Distrito Federal, quien además de su implicación delictiva en la prostitución de mujeres jóvenes a las que atraía con el engaño de ofrecerles empleo, lo hacía con recursos públicos que recibía su partido en la capital del país.
Aunque en su momento se realizó una investigación hacia este personaje, Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, no se llegó al fondo del asunto, pero hace unos meses de reabrió el caso.