Durazo Montaño, alfil de Alberto Baillères para sostener minera a cielo abierto en Sonora, acusan

El Ejido El Bajío ha resistido por décadas los ataques de la minera Penmont, propiedad de Alberto Baillerès; por ello ha sufrido ejecuciones extrajudiciales. El ejido acusa de que una de las víctimas pidió ayuda al gobernador Alfonso Durazo cuando era candidato, pero esta nunca llegó

Texto: Kau Sirenio

Fotos: Alexis de la Cruz

CIUDAD DE MÉXICO.- Para el vocero del ejido El Bajío, Manuel Hernández Collazo, el modelo extractivo muestra su verdadera naturaleza sin recato alguno. Opera en abierto contubernio con los tres órdenes de gobierno; los empresarios mineros hacen uso de las fuerzas armadas legales como la policía minera creada por el entonces secretario de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Alfonso Durazo Montaño.

Hernández Collazo acusó a Francisco Alfonso Durazo Montaño, ahora gobernador de Sonora, de mantener lazos con el magnate mexicano Alberto Baillères para sostener la minera Penmont en el ejido El Bajío:

“La policía minera se creó bajo el mando de Alfonso Durazo en la SSPC. Los primeros 118 elementos de esa corporación fueron a parar a la mina La Herradura de Alberto Baillères”.

Manuel Hernández Collazo

“Esta relación del gobernador con el empresario mexicano nos preocupa; porque hasta ahora no ha querido recibir una comisión de El Bajío para que le planteemos la demanda que traemos desde que el Tribunal Unitario Agrario dictó las 67 sentencias”, expone el campesino.

Cabe recordar que el ejido ya ganó por vía judicial diversos amparos contra la minera Penmont.

El ejidatario extiende su lona con la demanda que El Bajío trae al centro del poder político y económico, para denunciar la violencia que padecen desde que se organizaron para echar de su tierra a la minera Penmont. Por oponerse a la minera, tres de sus compañeros fueron asesinados; y una compañera se encuentra desaparecida. hasta el día de hoy.

Pero esto no impide que Manuel Hernández denuncie al cuarto hombre más rico de este país, Alberto Baillères. La empresa es enorme, sin embargo. Baillerès tiene en la bolsa a los grupos más poderosos del país. Por poner un ejemplo,  el 12 de noviembre de 2015, el magnate minero recibió la Medalla de Honor Belisario Domínguez, que el Senado de la República entrega a hombres y mujeres que han contribuido al desarrollo de México.

El presidente del Senado en aquel entonces. Roberto Gil Zuarth, dijo entonces que era un reconocimiento

«A su sobresaliente contribución en la promoción de la salud y al impulso del desarrollo económico, educativo y cultural de nuestro país, así como a la transformación de México en una nación más competitiva, justa y próspera”.

Justo aquel día, mientras el Senado homenajeaba a Baillerès, Simón Santiago Morales, Erasmo Santiago Santiago, Bartolo Santiago, Pedro Francisco Santiago y Raúl Ibarra de la Paz se encontraban en la cárcel de Hermosillo, Sonora. El tío de la entonces gobernadora, Claudia Artemisa Pavlovich Arellano, los acusó de despojo. Años después, Raúl Ibarra de la Paz fue asesinado.

El pasado 10 de enero, el campesino Hernández Collazo explicó para Pie de página:

“Las instituciones del Estado combinado con el crimen organizado han hostigado durante años a los ejidatarios. Ambas fuerzas son utilizadas para castigar a quienes se atreven a defender el territorio. Aun así, buscamos justicia en estas instituciones”.

Recordó entonces el asesinato de Jesús Robledo Cruz y su esposa, en mayo de 2021:

“Semanas antes de que asesinaran a José de Jesús Robledo Cruz y su esposa María de Jesús Gómez Vega, se reunieron con el entonces candidato a gobernador por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena). Lo que sabemos es que los compañeros buscaron al ahora gobernador para pedirle seguridad ante la amenaza que recibió cuando lo secuestraron. Nunca llegó la medida de seguridad”.

Sentencias contra Baillères

La resistencia en el desierto, así como la lucha legal del ejido El Bajío por la defensa de su territorio supera los 18 años, sin embargo, no se les ha hecho justicia. A pesar de que en varios tribunales han logrado sentencias a favor del ejido. Por medio de resoluciones judiciales se obligó a la minera Penmont suspender su actividad minera y devolver las tierras ejidales.

Hernández Collazo añade otro dato en el caso de El Bajío:

“El 25 de noviembre de 2018, cinco días antes de tomar posesión como secretario SSPC, usó la policía federal para entrar furtivamente al ejido y retomar el saqueo. Con el apoyo de la Guardia Nacional explotaron durante 17 meses la tierra de El Bajío”.

El 23 de marzo de 2020, José de Jesús Robledo Cruz dijo a Pie de página que la alianza de los Cruz Pérez con Pavlovich trajo violencia en el ejido El Bajío. Él mismo fue víctima de secuestro, y sufrió tortura junto con su esposa en 2017 cuando era comisariado ejidal. El 30 de abril de 2021 año, él y su esposa María de Jesús fueron asesinados Puerto Peñasco, Sonora.

Junto con el cuerpo de José de Jesús Robledo Cruz los asesinos amenazaron a 13 ejidatarios. Hasta ahora no se sabe cómo va la investigación de estos homicidios. El 12 de febrero de 2018 fue asesinado Raúl Ibarra de la Paz; y su esposa Noemí Elizabeth López Gutiérrez se encuentra en calidad de desaparecida hasta el día de hoy.

“El silencio y la negativa del gobernador de atender la demanda del ejido El Bajío nos hace pensar que él tiene compromiso con Alberto Bailleres; es por eso que ha desdeñado nuestro caso. Hay elementos para pensar de esta alianza del magnate mexicano con los políticos mexicanos” acusa el vocero

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