Migrantes afectados por políticas migratorias de Trump y decreto de AMLO
Uriel Saucedo/ SEMANARIO ZETA
Las personas migrantes que viven en ciudades fronterizas como Tijuana, están ante uno de los escenarios más complicados. Además del riesgo de infección por COVID-19, se enfrentan a las estrictas políticas que Estados Unidos ha implementado en el tema migratorio; mientras que en México se publicó un decreto para dar competencia a las Fuerzas Armadas en acciones de seguridad pública, lo que pone en riesgo la violación de sus derechos.
Paulina Olvera Cáñez, directora de Espacio Migrante, opinó que las medidas tomadas por el gobierno de Donald Trump en el tema migratorio, a raíz de la pandemia por la COVID-19 para endurecer la posibilidad de asilo, han sido solo una excusa para afectar a este sector de la población.
“Creo que el coronavirus fue el pretexto perfecto para la administración de Donald Trump, para continuar con lo que había venido haciendo, fortaleciendo el muro y destruyendo el sistema de asilo; porque, con el pretexto de la contingencia, cerró la frontera, pero solo para quienes quieren pedir asilo. En cambio, están aumentando las deportaciones”, destacó Olvera Cáñez.
Refirió que hay una enorme preocupación por el decreto de Andrés Manuel López Obrador, al dar competencia al Ejército y Marina, porque podrían ser una amenaza para la comunidad migrante.
El principal riesgo que observó fue la violación a los derechos humanos y un perfilamiento racial que han venido utilizando tanto el Instituto Nacional de Migración (INM) como la Guardia Nacional para detener a personas de color, de origen africano y haitiano, quienes, aun cuando tienen papeles en regla para vivir en la ciudad, han sido detenidos y acosados por las autoridades solo por su color de piel.
Asimismo, el presidente de la Coalición Pro Defensa de Migrantes, José Moreno Mena, coincidió que la actitud del gobierno estadounidense, al generar retraso en las citas para quienes buscan asilo, así como las deportaciones exprés, han provocado que exista población migrante flotante; estos no se quedan en el Centro Integrador, pero tampoco pueden ingresar a los demás albergues en la ciudad, porque no se está recibiendo nuevos integrantes debido a la pandemia, quedando a la deriva en la ciudad.
Consideró como un “error” que el gobierno de López Obrador permita que el Ejército y la Marina participen en actividades en apoyo de la Guardia Nacional, porque hay antecedentes -de décadas pasadas- en los que las Fuerzas Armadas violentaron los derechos de la comunidad migrante.