Nuevo fracaso en negociaciones Exportadora de Sal-ejidatarios (BCS)
Por Elías Medina
La Paz, Baja California Sur.- Fracasó la segunda ronda de negociaciones entre los campesinos del Valle de Vizcaíno y la Exportadora de Sal de Guerrero Negro (ESSA); la empresa paraestatal mexicana con capital japonés ofreció un incremento de 8 pesos de renta por hectárea al año adicionales a los 100 que había ofrecido hace apenas unos días, lo que fue recibido por los representantes de los ejidos Díaz Ordaz y Benito Juárez como una bofetada y una falta de seriedad, por lo que ayer mismo regresaron a sus comunidades para llevar a cabo asambleas y decidir qué acciones y de qué tipo se habrán de tomar, ante la negativa de la paraestatal de pagar un precio justo por la renta de las aproximadamente 35,000 hectáreas de ambas comunidades que están anegadas por el agua de mar y donde la compañía produce casi 9 millones de toneladas de sal cada año.
En la propuesta inicial de hace unos días, la empresa ofreció pagar 100 pesos más de renta por hectárea al año, pasando de 722 a 822, oferta que fue rechazada por unanimidad debido a que no corresponde al valor de la tierra en relación con la rentabilidad de la compañía, que tan solo en el año 2013 obtuvo utilidades por 1,830.7 millones de pesos, de los cuales usó solamente 36 millones para pagar la renta de las aproximadamente 55 mil hectáreas de los campesinos; es decir, menos del 2 por ciento.
Este sábado, los ejidos Díaz Ordaz y Benito Juárez sesionarán en asambleas para determinar del plan de acción, y entre tanto una comisión salió rumbo a la Ciudad de México para llevar una carta al presidente de la República, Enrique Peña Nieto, en donde se le pide intervenir en este asunto, a fin de evitar acciones radicales que a nadie convienen, como la que se registró en abril del 2006, cuando a causa de que los directivos de la salinera más grande del mundo se negaban a pagar un precio justo por la renta de las tierras, las tierras fueron tomadas por sus propietarios y las actividades de la empresa paralizadas.
Además de estas dos comunidades, son propietarios de tierras ocupadas por la salinera los ejidos Gómez Palacio y Héroes de Chapultepec, así como el Belisario Domínguez, aunque este último no ha sido entregado a los campesinos y está en resguardo de la autoridad agraria.